Pequeño restaurante retirado de la aglomeración, pero en el mismo casco antiguo de Altea y con una terraza preciosa.
Pedimos ensalada de tomate rosa, pulpo con boniato y ravioli de carrillada.
Todo viene como tapa pero es más que una tapa
Las tres tapas de 10 pero los ravioli son una delicia.
La atención de su camarero del que no recuerdo el nombre pero lleva tatuada el dinosaurio de George de Pepa Pig, es excepcional.
Más que recomendable.
Si tenemos ocasión repetiremos para probar el resto.
Mención especial tiene el pan recién horneado, un 10.
carlos figueruelo rodriguez
+4
Buen restaurante donde poder degustar unos platos de muy buena calidad y muy bien elaborados. Te atienden con mucha amabilidad y son rápidos en la atención.
El local muy bonito y tranquilo, además está en pleno casco antiguo de Altea.
En cuanto al precio no es demasiado elevado para la calidad y el entorno.
Muy recomendable el Pulpo con boniato.
Nosotros seguro que repetiremos
Ambiente tranquilo y acogedor. Servicio rápido y amable y la comida exquisita.
Platos elaborados y no excesivamente caros para la zona. Quizás algun plato un poco escaso de ración, por poner una pega.
Recomendable 100%.
Fuimos a cenar cuatro personas por los buenos comentarios y la verdad que no defraudó. La comida esta muy buena, pedimos anchoa del cantábrico, rollito crujiente, pulpo, canelón de pollo, ravioli de carrilera y para terminar el chuletón trinchado, este último lo pedimos al punto y llego un poco pasado. Nos quedamos con las ganas de probar la torrija pero no les quedaba. Recomendable reservar e ir con calma, la cocina es pequeña. Volveremos sin dudarlo para probar el resto de la carta.
Lugar pequeñito y acogedor. El menú degustación bueno, pero nos pareció un poco escaso para su precio. El servicio muy atento y amable. Altea preciosa, unas vistas espectaculares desde la iglesia.
Hemos comida allí esta mañana y la verdad hemos salido super contentas, pedimos croquetas de jamón, el ali oli con tomate, ravioli de carrillera y canelón de pollo eso sumado a cuatro copas de vino y dos cafés por 50 euros en total, la calidad precio muy buena. Lo recomendamos muchísimo
Muy buen sitio para cenar unas tapas y tomar un cocktail. El trato fue agradable, volvería a cenar en este lugar para probar el resto de tapas.
✨💚 Una taberna quirky con mucho encanto y un jardín precioso, se está muy a gusto cenando aquí, más íntimo que en las plazas más turísticas. Dentro también muy acogedor, con retratos curiosos de animales..
Atención excelente desde el primer momento.
Sólo estuvimos para picar un poco, la ensalada de burrata muy rica así como la piscina de setas. Volveré a probar más platos!
He comido espectacularmente bien. Platos deliciosos y de calidad. La atención muy buena y el ambiente muy agradable. Un placer para los sentidos.
![5]( "Recensione")
Anoche fuimos a cenar mi pareja y yo. Antes de pedir, Tomás (el tabernero que nos atendió) nos avisó de que la cocina iba un poco saturada y que íbamos a esperar un poco para pedir, lo cual me parece un muy buen gesto ya que en otros sitios te toman nota y te hacen esperar sin decir qué está ocurriendo y por qué se demora. Mientras esperábamos nos sacó unos pistachos para picar y unas tostas con humus casero que estaba buenísimo.
Una vez pedimos los platos llegaron bastante rápido y estaban todos increíbles. A destacar las croquetas de jamón, la anchoa del cantábrico, la coquita de berenjena y queso de cabra y, sin duda, lo mejor la torrija de postre. Comentar que mi novia casi llora de la emoción de lo buena que estaba.
Sobretodo destacar la buena atención de Tomás que estaba él solo encargado de todas las mesas de la terraza y aún así iba todo el servicio muy fluido. También comentar que al traernos la cuenta se les olvidó añadir el postre y al avisar de que no estaba nos invitaron.
Comida buena, ambiente encantador y atención inmejorable, sin duda restaurante imprescindible si vas a Altea.
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