David de Dueñas Ledesma
+4
Teniendo en cuenta las opiniones, nos decantamos por este restaurante. Nos atendieron muy bien, la comida toda muy rica y precio razonable (sin ser barato). Recomendable.
Todo IMPECABLE... Servicio más que amable... . No hay Callos a la Madrileña mejores.... Realmente, todo lo degustado las dos veces que de momento he comido, estaba a la misma altura de los Callos. También merece mucho la pena trasladarse al siglo XVIII visitando la fantástica bodega subterránea de la casa.
Local bien acondicionado, limpio, servicio rápido, comida casera, buena presentación, platos bien cocinados con sabores naturales y suaves, trato amable y educado por parte de Javier, su propietario, precios muy competitivos y ajustados ( menú 12 bebida incluida).
Muy Recomendable
Excelente comida. El menú estra entre 20 y 25 euros. Las porciones sin bastantes grandes y de buen gusto. El restaurante por dentro estra muy buen ambientado y decorado. La atencion fue muy buena. Adicionalmente tienen unas cuevas con unas antiguas bodegas de vino nuy interesantes.
Trato por parte del personal excelente. Comida de calidad a muy buena relación calidad-precio. De las mejores croquetas que he comido. Recomendable reservar o llegar muy pronto.
Acudimos entre semana huyendo de los precios de los restaurantes de la plaza, en algunos casos de 20-25 euros. Siguiendo valoraciones dimos con este restaurante y ha sido un acierto. Menú en miércoles a 12 euros, a elegir entre cuatro primeros y cuatro segundos, bebida, pan y postre. Las migas muy buenas, nada grasientas. Buena cantidad en los platos. Postres caseros. Atención del dueño muy buena.
Espectacular todo, tanto los platos como la atención.
De primero judías con matanza: auténticamente caseras, nada pesadas y con un sabor muy rico, además, un plato generoso.
De segundo rabo de toro: más de lo mismo, me lo esperaba quizás con un sabor demasiado intenso pero estaba muy tierno. De nuevo el plato muy generoso.
De postre tarta de queso casera: cuando dice casera, es porque es casera y con base de bizcocho y no de galleta y mantequilla.
Terminas de comer y solo quieres echarte la siesta, es como haberte pegado el atracón en casa de tu abuela cuando vas al pueblo.
La visita tiene sorpresa porque nos invitaron a bajar al sótano donde tienen una cueva/bodega del año 1800.
De nuevo destacar la buena atención recibida por parte de los camareros: Una chica joven muy educada y atenta y un caballero alto.
Muy recomendable! <3
Menú a 20.99 y 25.99 dependiendo de los segundos. Comida casera, filetes a la parrilla muy buenos. Tienen una bodega antigua con tinajas grandes que puedes visitar tras la comida. Buen trato.
La decoración auténtica, la atención inmejorable, la comida magnífica, y las cuevas la guinda del pastel. Una gran experiencia, muy recomendable. Repetiremos sin dudar.
Entramos por las valoraciones en google y la verdad q un acierto. Por fuera no llama la atención, no entraría pq confunde cn la pizzeria de frente... pero dentro es muy acojedor, cuidado detalle sin recargar y un hermoso pozo antiguo.
El Menú de 12e d calidad, comida en su punto d sabor, atún rico y arroz cn leche sabroso. el hombre muy majo agradable
Buena comida casera. Menú a partir de 20.90 con varios primeros y segundos.
Recomedable si visitas Chinchón, está cerca de la plaza, pero en un zona más tranquila.
Buena comida y excelente servicio, gente simpática. Además tiene unas bodegas en el sótano que son impelables de mirarlas.
Buena comida, excelente servicio, sitio acogedor, y tarta de queso espectacular. Buena relación calidad precio.
Buen lugar, buena comida lo único es que tardan un poco... Él trato fenomenal...
Comida casera y precios de menú asequible. Lo mejor la bodega de principios del siglo XIX.
Buena calidad de producto y atención. Precio razonable. Cuevas.
Comida casera. Servicio rápido. Exquisita atención. Todo en una vivienda popular que podría ser un museo
Buen sitio para comer, buena comida, postres caseros , muy atentos, imprescindible ver la cueva llena de tinajas
Juan Fernández Martínez
+5
Es un sitio confortable y con mucho encanto, con su gran viga de antiguo lagar, columnas, un pozo... donde tomamos un menú de 10€ que ofrecía platos bastante variados. Tanto mi mujer como yo quedamos muy satisfechos porque pedimos diferentes cosas y estaba todo buenísimo. Hay que felicitar al personal que lleva este lugar, que cuida hasta los pequeños detalles, como que haya un radiador en el baño o que el agua del grifo salga templada, ahora que estamos en invierno. Gran calidad en todos los sentidos por ese precio.
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