Restaurante en el barrio de contrueces. Especializado en comida y productos a la carta. Muy buena calidad de pescados y mariscos , aunque la calidad hay que pagarla. El encargado/dueño es el alma del negocio, atiende en persona a los clientes , muy sociable y aconsejando a los clientes.
En el menú diario , no se puede elegir , había lentejas y bocartes , ambas cosas muy ricas , aunque con los bocartes no había ninguna guarnición, eche en falta , al menos, una hoja de lechuga.
Un compañero pidió una ración de mero a la plancha, tenía muy buena pinta, y el compañero dijo que estaba muy rico, muy fresco y bien preparado. Nos pareció muy pequeña la rodaja que le sirvieron en relación al precio , 26 €
Lo que no nos gustó fue el gran ruido que había , para poder conversar había que gritar bastante. En mi opinión el ambiente mejoraría aislando , un poco, el local ...
En cualquier caso, buen restaurante y muy buena calidad de los productos ...
Nos regalaron un menú degustación,no sabíamos lo que nos esperaba
Tengo que decir que cenamos muy bien,lo que más nos gustó fue el pixin,sin dudas
Era un restaurante realmente estupendo.
Al no saber español, nos pusimos en contacto con el restaurante a través de Instagram e inmediatamente recibimos una respuesta confirmando nuestra reserva.
Todas las comidas que nos recomendaron estaban deliciosas, la hospitalidad y el ambiente eran excelentes y nos encantaría volver a visitar el restaurante.
Gracias por una gran noche 😊.
El comedor es mono pero el bar no tanto. El servicio muy bueno y la comida muy buena, rubiel al horno, rodaballo plancha y pixin a la plancha, los postres espectaculares, milhojas de fresa y canutillos. Vale la pena probar
¡Espectacular! No conozco la zona pero fuimos por recomendación de unos amigos y muy gratamente sorprendidos. Nada más llegar el trato súper agradable, el menú es variado con buenas recomendaciones. Comenzamos con las zamburiñas y calamares frescos, y después con el besugo para terminar con los canutillos con chocolate caliente de postre. Estaba todo buenísimo, y casi babeando con el olor cuando estaban emplatando el besugo delante nuestra. Una experiencia estupenda, volveremos.
Pescado excelente, la carne bien y los postres ricos. Un poco lenta la cocina por estar lleno pero aceptable. Buena atención por parte del personal.
Un sitio al que solo vas por recomendación, porque no está en sitio de paso o te llama la atención por su diseño y arquitectura.
Sin dudarlo, es uno de los mejores sitios para comer, tanto por su atención que es exquisita, siempre te aconsejarán lo mejor, sin llevarte a gastar más, sino todo lo contrario, y esa honestidad se valora.
Encontrarás una carta aunque con muchas modificaciones ya que el pescado es dependiendo de lo que vea en la lonja esa mañana, pero no dudes que escogerá lo mejor.
La relación calidad precio es insuperable, un restaurante para llevar invitados, y quedar muy bien.
Por cierto, si te gusta el gin tonic no dejes pasar la oportunidad de tomarte uno después de la cena o comida, espectaculares.
Lugar sorprendente. Buena sidra y a buena temperatura (Zapatero) Buena carta y sugerencias. Comimos ensalada de bonito en escabeche hecho por ellos mismos, muy buen punto y cantidad. De segundo ventresca de bonito. El punto era inmejorable y el sabor excelente. Tienen buenos postres, probamos milhojas y canutillos. No hay pega al sitio, y buena atención, volveremos.
Sentarse y dejarse llevar aquí, es una experiencia siempre acertada.
Para mi es un 5 estrellas porque todo lo que comi estaba espectacular. Era mi primera vez, había oído hablar mucho del sitio y lo que me ha pasado es que quiero volver de nuevo. Comimos quisquilla, setas con foie, pixin con bugre y de postre una tarta de hojaldre con fresas y nata.
An error has occurred! Please try again in a few minutes