Muy recomendable. Nos gustó especialmente la ensalada de queso de cabra, fresas, arándanos y almendras. El camarero que nos atendió un diez. Volveremos!
Local acogedor, todo en madera en estilo reciclado. Tiene un pequeño comedor anexo al bar bastante acogedor en el que venden piezas artesanas echas con madera reciclada
Pedimos croquetas se setas y de morcilla, ambas buenísimas, También nos animamos por la ensaladilla rusa que nos gustó y unas albóndigas en salsa de Champiñones que estaba buenísima. De postre, ya bien satisfechos, nos tomamos yogur casero con confitura de higo
Nos gustó mucho todo, hasta el servicio, aunque en un momento dado escuchamos una palabra malsonante dentro se la cocina pero de buen rollo jajaj. Nada importante. Volveremos encantados!
Si queréis disfrutar, haced caso a las recomendaciones de César. Os atenderá y guiará de la mejor manera.
Comed Zamburiñas (están para llorar) y el tomate bien carnoso y sabroso.
Un sitio para volver.
César Rodríguez de Francisco
+4
A pesar de estar hasta arriba de trabajo nos han atendido lo mejor posible. Hay que valorar el hecho de mantener el tipo ante los veraneantes, que no siempre son un ejemplo de educación y respeto. En estas fechas hay que comprender y estar dispuesto a esperar y a tener un poco de paciencia. Hemos comido bien, a la sombra en el exterior. Yo no permitiría fumar ni siquiera en la terraza, no podemos dejar en manos de esa gente incivica y carente de respeto y empatía la decisión de encender un cigarrillo a un metro de niños pequeños, en plena comida.
Las croquetas están riquísimas, las que más me gustaron fueron las de morcilla.
El resto de platos están bien trabajados y se nota la dedicación. Por la variedad y los platos fuera de carta, es un restaurante que busca innovar con platos diferentes.
Los postres caseros es algo que no puede faltar, la tarta de queso con mermelada de arándanos te encantará.
El brownie también está bueno, pero se le echa en falta un toque de alguna mermelada.
No es barato pero por la calidad se puede aceptar, por 20€ puedes comer pero no acabar lleno.
Empezamos con el trato a los clientes, Susana la camarera que nos estuvo atendiendo es un encanto de persona 10/10, nos recomendó las croquetas y la ensalada gratinada, muy buena elección.
El sitio está muy bien, fuimos a la hora de comer fuera de temporada por lo que no tuvimos problemas para sentarnos.
Muchas gracias Susana por el trato con nosotros.
Nos guiamos un poco por los preferidos de la mayoría y la verdad que ha sido una sorpresa la ensalada gratinada, merece la pena probarla de verdad, extraña pero bien compensada, las rabas exquisitas, las croquetas (espinacas y parmesano) la verdad que la espinaca no tiene mucho sabor pero el parmesano podría estar mas presente, en su favor hay que decir que tiene un buen crujiente. Para terminar la tarta de queso sublime y buen café. Trato excelente y muy agradable.
Solamente probamos un par de postres, ya habíamos cenado y pasamos por allí dando un paseo. Estaban muy ricos, en concreto la tarta de queso: impresionante. Faltaba poco para cerrar pero aun así nos dejaron pedirlos y comerlos tranquilamente.
Nos pilló la lluvia y fuimos de casualidad. Probamos los platos del día fuera de carta, las croquetas y un pulpo preparado muy original (con huevo cocido, pimientos y patatas fritas en taquitos). Todo muy bueno.
De postre solo pedimos un flan de queso casero y estaba espectacular, volvería solo por él 😃
Hemos probado las croquetas con jamón, muy buenas. Las rabas y el bacalao también 👍🏻
De postres mouse de limón y el flan 10/10
Ma Dolores Ferreiro Gutiérrez
+5
Buen servicio, rápidos y atentos. Muy buenas la recomendación.....ensalada con queso de cabra, fresa y arándanos...croquetas muy cremosas y sabrosas. El postre sin palabras. Muy recomendable.
Un sitio muy agradable. Cenamos dos personas, salpicón de bonito, Calabacines rellenos de verduras y chipirones encebollados. Con tres copas de Ribera cada uno, por 55eur
El servicio muy amable y muy rápido a pesar de estar casi lleno
Volvemos fijo
Un sitio muy agradable. La comida estaba buenísima, las croquetas muy buenas todas, el tomate el mejor que hemos probado (espectacular), y el salpicón de bonito muy muy bueno. En definitiva, cenamos genial, y a cada cosa que probábamos nos gustaba más.
Todos los camareros súper majos, en especial Elia, muy agradable y atenta de todo, siempre con una sonrisa que iba acorde con su profesionalidad.
Repetimos seguro.
Sitio encontrado por casualidad. Los espárragos espectaculares, como la carne y los postres, que son caseros y se nota. En general todo de muy buena calidad. Repetiría sin duda
Las croquetas de espinacas y las de queso azul están buenísimas. Pedimos media ración de cada una, una ensalada y una chuleta.No pudimos ponerle pega a nada porque todo estaba tremendo. Si hay algo por lo que doy 4 estrellas es porque nos cobraron el pan, pero eso es anecdótico porque muchísimos sitios lo hacen. El trato cordial, el camarero muy amable y atento. El local está muy bien adornado, juvenil y playero.
El mejor restaurante de Loredo, yo diría el único. Cocina tradicional y creativa. Cualquier plato es de diez. Los postres caseros, excelentes. No se puede estar en Loredo sin visitarlo casi a diario..
Íbamos buscando otro sitio y como estaba cerrado probamos justo el de enfrente. Ha sido un acierto total, la comida espectacular, el servicio rápido y el chico que nos atendió fue encantador. Sin duda si volvemos por Loredo repartiremos.
Sheila Izquierdo Carreño
+5
Croquetas caseras y saben a lo que dicen y no saben a harina. Croquetas de morcillas y dátiles y las jamón, un éxito. Pimientos asados con queso de cabra y labondigan de Tudsnca con salsa de champiñones, casero y muy bien hecho, rebañamos el plato. De postre por favor no os perdáis el yogur y la mouse de limón...¡Un espectáculo de cremosidad! Lo mejor para comer en Loredo y la atención muy buena, atentos y rápidos en todo momento y aportando. Gracias chicos!!!
An error has occurred! Please try again in a few minutes