Lo tenía anotado desde hace tiempo y estando cerca aproveché para pedir un brownie y estaba muy rico, tiene unos toques saladitos que le van muy bien, y por dentro amelcochado. La señorita que nos atendió muy amable, sonriente, muy buena atención, sin tener que decirle nada, al ser dos, nos entregó el brownie (que previamente calentó) con 2 cucharitas, esos detalles dicen mucho. Disponen de una mesita afuera del local, sin sillas, pero que va bien para comer. También me preguntó si vivía ahí porque por cada visita voy obteniendo un sello y al final de completar todos pues tienes una dulce recompensa, por eso, el buen servicio y el buen sabor, volveré para probar sus helados, y claro, repetir el brownie.
Me ha encantado los sabores de la tarrina que pedí, la atención por parte de la chica en mostrador maravillosa, tuvo el detalle de darme patitas heladas para mis peludos, ameee🥰🐶
Tipica heladeria pero con buena variedad de sabores. Probamos 2 y la verdad buenisimos, la ubicacion para tomarlo paseando es perfecto. La chica que nos atendio fue muy amable, un placer!
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