Mi experiencia en el restaurante cerca de la playa fue fantástica. Disfruté de una cena memorable con un ambiente relajado y vistas impresionantes. El pescado que pedí fue excepcionalmente sabroso y fresco, cocinado a la perfección. El servicio fue amable y atento, lo que contribuyó a una velada muy agradable.
Fuimos a cenar y salimos encantados, el trato es de 10, muy atentos y rápidos, además de amables. Pedimos patatas canarias (buenísimas), puntillitas fritas y queso canario. Todo muy rico y raciones con buena cantidad. Las salsas que ponen también están súper buenas para acompañar las patatas. Muy recomendable visitarlos.
No te dejes engañar por su aspecto Guirichiringo desabrido en plena playa del Castillo, porque tras más de 30 años sigue siendo uno de los mejores sitios para comer pescado fresco 🐟🐠🦑🦐. Buena relación calidad precio con la sensación de chiringuito de playa.
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