Como muchas otras reseñas indican, el lugar ha cambiado de nombre: ahora es Casa Roman y nos ha soprendido porque otros años no nos sonaba que fuese un local pet-friendly (aunque solo sea en la terraza). Pero como dice el refrán "a caballo regalado..." asi que aprovechamos para cenar con sus estupendas vistas. Probamos las hamburguesas (aunque tambien habia raciones) y quedamos muy contentos con el resultado. Hamburguesas de buen tamaño y precio con un toque gourmet. Y no dejeis de probar sus postres! Madre mia, que locura...
Además, el trato del camarero muy amable y atento. Preocupado en todo momento si estábamos agusto o satisfechos. Un lugar estupendo que solo añade atractivos a esta zona, sobre todo para un cliente como yo que siempre va con un compañero de cuatro patas y a veces se las ve y se las desea para conjugarlo todo en unas vacaciones.
Comimos a la carta y todos los platos excelentes! Muy buena atención y servicio. Nos invitaron a los cafés. Muy recomendable. El comedor es bonito con muy buenas vistas.
En el menú de hoy había marmitako y muy bueno por cierto. No volvió nada en el perolo.
La alternativa de primero era una ensalada con una presentación muy original...y las dos que llegaron a la mesa volvieron vacías.
En el segundo los tres adultos pedimos la brocheta solomillo y aunque estoy seguro de que la alternativa de pescado estaba buena, también fue un acierto...
Para los peques estaba complicado porque no comen precisamente de todo, pero hemos preguntado a la camarera si nos podía preparar un plato combinado fuera de menú y nos lo ha puesto muy fácil.
Hemos podido disfrutar de la comida, de un gran ambiente y de unas buenas vistas.
Casi olvidó el postre... Muchas alternativas muy apetecibles, pero creo que he acertado: la yema tostada con helado estaba buenísima...
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