Reservamos para comer un lunes de julio y cuando llegamos estaba lleno (el local es pequeño y algo ruidoso). El camarero nos orientó muy bien con las cantidades. Pedimos mejillones y pimientos pero no tenían, así que al final tomamos para 2 una ración de zamburiñas (riquísimas y buen tamaño), otra ración de chipirones a la plancha (buenos también y abundante), además de media ración de raxo con patatas (rico). Postre tarta de queso que estaba aceptable. Servicio muy atento y amable. Baños limpios. Calidad/cantidad/precio probablemente de lo mejor de la zona.
Increíble lugar para comer. El marisco espectacular, los percebes, zamburiñas, pulpo, berberechos etc etc… todo muy rico. Para volver al día siguiente. Relación calidad precio muy muy buena. Merece la pena venir, aunque haya que hacer kms.
Juan Mari Madinazkoitia
+5
Comimos ayer Percebes, pulpo y una bandeja de navajas con zamburiñas, acompañados de vino blanco Godello. No quiero exagerar porque tampoco como marisco cada dos por tres, pero en mi vida he comido estos productos tan buenos y bien preparados en su punto exacto como aquí!!!! Salimos super encantados y creo que lo que pagamos, 63€ entre los dos, está de lujo.
El dueño Martín encantador y preguntando que tal estaba todo cada vez que pasaba, y sus camareros-as atentos y serviciales a cualquier necesidad.
Es un bar con mesas para comer al que acude la gente del pueblo, detalle que da seguridad de Calidad y servicio.
De total confianza y el domingo volveremos a disfrutar de sus mariscos.
Ha sido un placer!!!!
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