Fuimos a probar este nuevo restaurante por recomendación de una amiga. Nos gustó el toque innovador que meten en los platos, y las porciones generosas de pescado en los nigiris. El sashimi de gambón nos sorprendió, al igual que la selección de Uramakis que realizó el chef al momento.
Y contra todo pronóstico, el tiramisú de postre estaba espectacular, pero tiene sentido ya que los dueños son italianos.
Sitio muy recomendable si te gusta la comida japonesa con fusión.
Un lugar acogedor con muy pocas mesas, así evitas el bullicio de un restaurante grande y es algo más íntimo.
En cuanto a la comida tiene buena calidad y sabores diferentes. Me encantó y sorprendió mucho el helado de wasabi.
Hemos estado en este pequeño japonés este fin de semana, y posiblemente hemos comido el mejor sushi de la isla!
Un trato cercano y familiar, un ambiente relajado y sin prisas y una comida riquísima. Con todo esto, hemos tenido una combinación perfecta.
Nosotros nos dejamos asesorar por el chef, totalmente en sus manos con el menú OMAKASE. Muy recomendable si queréis probar platos variados.
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