Restaurante sencillo en el centro de La Cala de Mijas. Buena calidad en los platos, precios bastante asequibles (15€ pp. aprox.) y raciones muuuy generosas. El servicio ha sido rápido, los camareros atentos y amables. La higiene del local está bastante cuidada. Quizá la decoración es mejorable, al ver el aspecto del lugar uno cree que no merece la pena, pero es una idea equivocada. Todo lo que hemos comido estaba muy rico y sabroso, eran platos abundantes que casi ninguno se llegó a terminar. La única pega que pondría es que ya que todo lo que sirven es tan fresco, las patatas fritas también podrían ser caseras. Por todo lo demás, seguro que repetiría en este local.
Cenamos el sábado pizzas que estaban muy buenas y sabrosas. Además estuvimos muy bien atendidos por el camarero de los tatuajes, que estuvo pendiente de nosotros durante toda la comida y los postres. muy majo y profesional
La comida estaba buena, el servicio fue rápido y estuvimos muy buen atendidos por el camarero de los tatuajes, que estuvo muy pendiente de nosotros en todo momento. Fue muy simpático y profesional durante la cena.
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