Fuimos una tarde-noche de sábado de visita por este local y nos llamó la atención la relaciones públicas que nos invitó a entrar de un modo muy relajado. Nos mostró la carta y nos llamó la atención especialmente, los ingredientes de las tostas y nos animamos a entrar. Es un local moderno, de decoración minimalista y hípster. Llama la atención los diferentes espacios con mesas y sillas, bancos o sofás, que invitan a una charla tranquila sin importar el tiempo que invirtamos en ello. Probamos dos tostas diferentes y nos las repartimos, una de ellas de de salmón con queso de filadelfia y otra de tartar de tomate con bacón al jarabe de módena y mostaza. Decir que el tartar estaba delicioso y por unos 4€ más la consumición, el tamaño como la calidad de los productos, nos resultaron excelentes. Destacar que tienen ofertas varias con lo cual recomiendo preguntar a la RR.PP. al entrar: combinados, gins o para picar. E incluso, te pueden servir comida para llevar de la que tienen en la carta. Por la zona en la que está ubicado, es un local en el que, si no quieres tener mucho ruido y mucho barullo y un ambiente moderno, divertido y cómodo, me parece ideal. Pendiente a quedado, probar los combinados y los postres para la próxima cae alguno seguro.