Esta todo muy bueno y los camareros son muy agradables. Recomido mucho las banderillas de boquerón, la ensaladilla rusa la tosta de mantequilla y anchoa, y las patatas. Dicho esto, se paga como si fuera una comida, pero no lo es. Es un aperitivo y no sales con sensación de haber comido. Si vas mentalizado de que te vas a gastar 15-20€ y luego comer genial. Si crees que vas a comer por 15-20€ no es el caso.
Para los amantes del vinagre, como su nombre indica, es un sitio al que ir. Nos tomamos unas gildas, un matrimonio de boquerón con anchoa muy rico. Pero lo que realmente nos encantó fueron los berberechos y los mejillones con un toque ahumado. El personal muy amable.
Apuesta segura para tomarse una caña o vermut y terminar de tapeo :)
Oferta variada y atención rápida. Algunos días a las horas pico puede ser difícil encontrar sitio libre.
An error has occurred! Please try again in a few minutes