Wir waren in der Ruine und auf dem Parkplatz wurde uns die Werbung von diesem Restaurant in die Hand gedrückt.
Und wir haben uns drauf eingelassen. Das Restaurant scheint Familiengeführt zu sein. Die Bedienung war sehr aufmerksam und nachdem wir uns als Deutsche geoutet hatten, wurde versucht in Deutsch mit uns zu reden. Das fanden wir sehr sympathisch. Das Essen war Hausgemacht und lecker. Wir bekamen für 11 euro ein 3 Gang Menü mit Nachspeise und Getränke. Das ist meines Erachtens TOP. Sitzen konnten wir auf der Terrasse was bei der Witterung top war. Es gab auch eine kleine Sprinkleranlage welche einen Nebel erzeugte. Das war sehr angenehm.
Das Essen selber war schmackhaft und wir sind satt geworden.
Von mir gibts 5 Sterne für die Betreiber und das Essen. Erwartet keine Spitzengastromonie, wird aber durch die Betreiber wett gemacht. Selbst zum Abschied wurde uns nachgewunken.
(Traducido por Google)
Estábamos en las ruinas y en el estacionamiento nos entregaron el anuncio de este restaurante.
Y nos involucramos. El restaurante parece ser de gestión familiar. El servicio fue muy atento y después de que nos identificamos como alemanes, intentaron hablar con nosotros en alemán. Eso nos pareció muy agradable. La comida era casera y deliciosa. Nos dieron un menú de 3 platos con postre y bebida por 11 euros. En mi opinión esto es TOP. Pudimos sentarnos en la terraza, lo cual fue genial teniendo en cuenta el clima. También había un pequeño sistema de rociadores que creaba niebla. Eso fue muy agradable.
La comida en sí era deliciosa y estábamos llenos.
Le doy 5 estrellas por los operadores y la comida. No esperes una gastronomía de primer nivel, pero los operadores lo compensan. Incluso nos dijeron adiós con la mano.
Antes de la visita al castillo de Miravet, comimos aquí y el personal muy muy amable y súper atento. Nos recomendaron las costillas y se deshacían en la boca sin masticar. Hay entrante, primer plato, segundo, postre, cafe y bebidas (agua, gaseosa y vino) a una precio regalado teniendo en cuenta la calidad. Si volvemos por la zona no dudaremos en ir a comer a Pizzo Restaurante. Menú muy rico :) La única pena es que terminan en diciembre.
Calidad precio equitativo solo una persona para hacer las comandas y servir la pobre mujer se merece una paga extra, hace un poco de calor en el comedor, en general por 15 euros en agosto no se puede pedir mås ,las costillas de cerdo del menú buenisimas
An error has occurred! Please try again in a few minutes