Volviendo a Sevilla tenia que aprovechar la oportunidad de parar en algun sitio de comida casera de extremadura y sinceramente, quedé muy satisfecho.
Pedi el menu del dia, Revuelto de champiñones, judias y jamon. Con muy buena presentación y buena racion de comida. Sabor autentico y muy bueno.
De segundo pedi el solomillo de cerdo a la plancha, tambien muy bueno todo.
Destaco el personal atento en todo para sacar las comandas a tiempo sin que se enfrie la comida. Recomiendo esta parada por Monesterio.
Café a 1 €. Es un pueblo en el que suelo parar a medio camino cuando voy al sur, se llama Monasterio. Es bastante grande y tiene bastantes tiendas para comprar embutido típico de allí. Este bar en concreto suele ser tranquilo y barato. Atención un poco lenta. Limpieza normal. Hay un señor mayor fuera vendiendo morteros grandes hechos a mano, no se si es de la casa o está para vender.
Pues veniamos de viaje desde Santiago y decidimos desviarnos para almorzar. El acierto fue pleno. Hemos comido de lujo. A buen precio y la camarera que nos puso el servicio es muy profesional. Enhorabuena
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