Lucrecia fue una apuesta arriesgada.
Estaba alojada en Porto ( Centro ) y decidí pasarme la mañana en Matosinhos ( Playa )
A la hora de almorzar me llamo bastante la propuesta; no nos arrepentimos.
El staff muy amable y servicial, jovenes respetuosos con la iniciativa de separar los platos destinados a compartir. Los platos tenían una porción ideal, presentación sencilla en donde destaca la calidad de los productos. Muy buen ambiente en cuanto a decoración y música, en cuanto a personas, más locales que cualquier restaurante del centro. La pasta trufada con hongos estaba genial, la salsa sin empalagar y los hongos en perfecta cocción. La pizza muy finita pero llena de sabor.
Candela Fernández Armas
+4
Decoración moderna , toque muy bali en oporto , cozy,buena comida.
Hay dos razones por las que no les doy 5 Estrellas , la trufa que usan no es de “verdad” entendiendo esto como que no rayan una trufa en el plato si no que usan un condimentado . Y la calidad del mojito.
El resto , excelente , buen trato , mejor reservar si no , no cenas .
La pizza estaba rica , solo a comentar que deberían usar trufa fresca y rayada en vez del condimento y a mi pareja le fascinó los sorrentino que tomo .
El postre brutal xxl ,tiene una pequeña terraza con mucho encanto .
Precio :30 euros / persona razonable
La descubrimos por qué pasamos con el coche y estaba preciosa iluminada y quise ir a ver qué se podía comer .
Restaurante Chick, muy buena decoración, camareros demasiado estirados, y la comida normalita....
Pero me sorprendió el precio, esperaba que por el estilo, decoración y ubicación fuera mucho más caro.
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