Restaurante de alta montaña, bien situado. Con parking propio.
Es un lugar muy acogedor, aún siendo muy espacioso. La música es agradable, te deja poder hablar con tu acompañante pero tenerla de fondo ayuda a no escuchar las otras mesas.
La comida muy buena, una combinación muy acertada....
El canelón y vieiras increíbles
( bueno todo lo comido )
El trato de Ivan fue excepcional.
Lo recomiendo.
Hacía mucho tiempo que no íbamos y fuimos porque sabíamos que habían cambiado la carta y personal. Nos encantó. La calidad del producto, el foie hecho en casa, las vieiras a la brasa, el picantó, la tarta de pera… en definitiva todo lo que probamos. El servicio un 10. Os aconsejo que os dejéis recomendar por Iván a la hora de pedir, con nosotros acertó en todo. Volveremos sin dudarlo.
No pedimos muchos platos pero lo que pedimos nos gustó mucho.
A destacar el arroz de montaña, el mejor que he probado nunca. El grano estaba al punto, ni seco ni caldoso, la carne y setas que llevaba buenísimas y la cantidad estaba muy bien.
El local es grande y amplio y el servicio muy correcto.
Volvería sin pensarlo solo por el arroz :)
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