Gran calidad. Buena relación calidad/precio. El sitio sorprende por su buena iluminación y ventilación. Muy acogedor. Buen precio para el menú del día. Yo comí a la carta.
Restaurante ubicado en un sótano, con unas escaleras de acceso empinadas y estrechas que dificultan la entrada si vas con carritos o bebés.
El trato del personal es cálido y cercano, ambiente animado y familiar. Nos sentaron en una mesa al final del salón donde estuvimos muy agusto y pusieron una trona muy cómoda para la bebé. Comimos de menú un domingo y fue inmejorable, recomiendo la merluza en salsa. La ensalada de pimientos de piquillo y los crepes también estaban muy ricos, realmente todo lo que probé estaba exquisito, con unas raciones más que correctas de cantidad. Si volvemos a Donosti repetiremos sin dudarlo, gracias por tan agradable experiencia!
Magnífico restaurante en San Sebastián. La decoración es rústica-moderna, con vigas de madera a la vista y con el color blanco como protagonista. El servicio es impecable, muy atento y amable, profesionales con muchos años de experiencia y no por ello desidia en su trabajo. La comida, producto fresco y de la tierra; probamos los pescados y quedamos muy satisfechos con la calidad y la cantidad. Tienen menús y también amplia carta. Altamente recomendable.
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