La cena fue espectacular, el ambiente, el servicio (los 2 camareros que estaban excelentes). No le pongo un 5 en cocina porque pedimos solomillo de vaca y por una parte se le paso un poco al cocinero, pero por lo demás agradabilísimo. Ensaladilla riquísima, quesos buenos, bacalao espectacular, la carne de vaca muy buena (excepto por lo comentado anteriormente) y la tarta de queso buena también. Tengo que agradecer el detalle de los camareros de traer una vela en el postre como solicité en la reserva ya que estábamos de cumple, además salieron de cocina por un sitio distinto del habitual para que la persona del cumple no se diera cuenta hasta estar en la mesa! Chapo!
Preciosa terraza junto a la plaza de España en el parque de Maria Luisa y justo a la espalda de la que fue entrada principal de la exposición Ibero americana de 1929.
Carta no muy extensa pero suficiente y buen servicio en mesas, con personal atento y eficiente, y con las medidas COVID pertinentes.
Pedimos boquerones y choco frito, huevos rotos con patatas y jamón y presa ibérica.
Todo con buena presentación en plato y cantidad suficiente.
No me gustaron los huevos rotos porque no se parece en nada a la presentacion clásica.
El plato es patatas paja con huevo, parecido a bacalao a la dorada.
La estancia en la terraza es muy agradable y en nuestro caso, dábamos al parque y teníamos una magnífica vista de un jardín romántico.
Poniendo en la balanza de un lado la fantástica ubicación del restaurante en el parque de M. Luisa, la buena atención de la profesional que nos atendió y las medidas anti COVID perfectas y del otro lado la cocina que no nos resultó tan buena para acompañar el rico Ribera del Duero Matarromera…el resultado final es aceptable.
El aseo regular.
Volveré por supuesto y probaré otros platos para que ojalá pueda puntuar aún mejor.
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