Sitio espectacular para tapear en Sevilla. Llegamos una noche de casualidad, paseando de camino al hotel y con ganas de picar algo, sin rumbo, cuando un camarero asoma y dice alegre: “qué pasa familia? Quereis cenar? Entrad que no os vais a arrepentir” ¿Típica frase para cazar guiris? Quizás. El caso es que echamos un vistazo al interior, hay un par de mesitas pero se ve tranquilo. Qué raro, piensas para adentro… hay bares llenos y este no tiene mucha gente… pero la verdad es que el local te gusta, tienes buena impresión y decides entrar y probar. Todavía no lo sabes pero has tomado la decisión correcta. Empezamos a pedir dejándonos aconsejar por el camarero “a ver si es verdad y no nos arrepentimos”, le decimos jocosamente. Sonríe y dice que ya veremos. A la segunda tapa le decimos: “pues no, no te has equivocado”. Ahora el de la media sonrisa es él, mientras nosotros miramos de reojo hacia la cocina esperando las siguientes tapas. Un servicio impecable, de calidad, con cariño en lo que hacen. Y la comida… qué decir, productazo bien tratado. Sin perder el norte pero con un toque especial. Terminamos yendo al día siguiente para comer. Y si fuese de Sevilla, sería de mis sitios de referencia sin duda. Terminamos la comida con una agradable charla con el chef y el encargado. Denotan amor y pasión por lo que hacen. Si disfrutas comiendo y te gusta la hostelería, este sitio es tu casa.

Espectacular sitio!! Qué acierto!!. Un lugar bien montado con un equipo espectacular, amable, atentos y simpatiquísimos. El lugar ideal y muy bien decorado. La cocina toda riquísima y a precios estupendos estando en pleno centro de Sevilla. Dispone de terraza. Volveremos pronto pues quedamos encantados!!.