Al llegar estaba vacío, un buen sitio con un buen ambiente, el cocinero "Ismael", un crack la verdad muy majo y al llegar nos trataba con respeto y muy buen rollo. Que con estos tiempos de estrés se agradece mucho la verdad.
Nosotros pedimos una sangría que estaba la verdad muy buena y refrescante, y para cenar escogimos 1 sándwich, 2 hamburguesas de jamón serrano que podíamos escoger algún ingrediente pero éste le subía un poco el precio 1€ exactamente y por último una pizza de bacon que tenía un sabor asombroso, un toque ahumado que flipas.
Si no tenéis claro que comer hoy y queréis un buen ambiente y comida, venid aquí.
Saludos Ismael😁
Sitio precioso y al lado del mar. Precio adecuado y el cocinero y encargado, Ismael, de 10. Un crack
Un sitio para desconectar de la rutina, un buen servicio en un chalet reconvertido en Bar/Restaurante con eventos y piscina, GENIAL A TODOS LOS EFECTOS!!
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