Muy satisfecho, decidí ir a comer con un amigo y el restaurante se encuentra en una zona muy bonita de la ciudad. A nivel de calidad precio es excelente, la comida estaba muy buena y se veía calidad. El servicio era muy correcto, nos buscaron sitio y me sentí atendido en todo momento. Sin duda, repetiría. Recomiendo mucho la crema de salmón, fue el plato que más disfruté sin duda.
Repetimos después de varios años, el precio del menú ha subido bastante a diferencia de hace unos años y el vino no entra en el menú diario con un coste de casi 25€.
La comida excepcional, de 10.
El servicio bien pero todo muy acelerado, aún estábamos terminando los primero y ya nos trajeron la paella de segundo, atentos pero con mucha prisa, había volumen de gente pero había mesas libres, así que no iban rápido para poder remontar la mesa, si no que ya debe ser la forma de trabajar.
Estuvimos sentados en la parte de arriba y a cierto momento de la comida salió bastante humo de la cocina y había humo en la sala de arriba siendo un poco desagradable y más siendo cocina cerrada, cuando es abierta lo puedes "entender" pero personalmente no me gusta volver a casa con toda la ropa con olor a comida.
Le doy 4 estrellas por estas cositas del servicio, del humo y la subida de precio un poco disparada para un menú diario sin vino.
Pero creo que a nivel de comida puedes pedirte lo que quieras que estará todo bueno!
Ya como último destacar que tanto el cheescake como la crema catalana estaban muy bien, punto muy positivo que en muchos sitios los postres no se cuidan y es tan importante como el primero o segundo plato.
Magnífico!!! Lugar muy acogedor en una ubicación única. Probamos el menú del día y es de 10: Gran variedad de platos a escoger, todos ellos muy sabrosos y con una presentación cuidada.
El personal increíblemente atentos, serviciales y agradables.
Un lugar que es un must y que no te puedes perder.
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