Un gran sitio para comer, son tres veces las que hemos comido aquí y la verdad es que cada vez mejor, tiene un salón muy grande y terraza exterior, el trato del personal es impecable y la comida muy buena, son expertos en carne a la brasa y los postres caseros están muy ricos, sin duda volveremos.
Un sitio muy bonito con una terraza bien grande. Se come muy bien. Nosotros comimos unos calamares riquísimos y una buena ración y después un cachopo de ternera espectacular.
Hay que reservar, nosotros fuimos sin reserva a primero de Agosto y nos atendieron porque justo les quedaba una mesa libre.
Nos tardaron un poco en servir pero era normal puesto que tenían todo lleno.
Restaurante 100% recomendable para almorzar de menú o tapear con unas buenas raciones. Mención especial a sus cachopos y a sus postres caseros, sobre todo, a la tarta de la abuela (sencillamente espectacular).
Menú calidad-precio excelente. Local limpio, espacioso y bien ubicado. Trato personal exquisito. Visita culinaria obligada.
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