Espectacular. Comida rica, carta hecha con mimo, muy buen ambiente. Los dueños son super majos. Es un sitio genial para ir con amigos a echar vinos coreanos, soju y picar tapas coreanas buenísimas. Muy recomendable.
Se puede solicitar que se preparen opciones vegetarianas.
El local es pequeño y mantiene lleno. Es bueno reservar.
No es barato, pero la calidad lo vale.
Si no sabes que pedir puedes decantarte por el menú del día. Eso hicimos nosotros y estaba todo buenísimo! Es un sitio chiquitito y recomendado! Tanto el té como el café son coreanos, y ambos están muy buenos.
Auténtico y delicioso.
Ni rastro de glutamato.
El nabo encurtido que te ponen de aperitivo, una locura. Los fideos de patata, épicos. Pollo picante, delicioso. Los rollitos de panceta y enoki (primera vez que los probaba), tan tan ricos.
Perfectamente atendido y local con encanto desenfadado.
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